domingo, 17 de abril de 2011

UNA TARTA IMPROVISADA

Solo teníamos el bizcocho de chocolate, un paquete de fondant blanco, tintes y moldes de galletas. Con esto había que hacer una tarta de cumpleaños esa misma tarde antes de que el protagonista de esta historia llegara a casa.

Decidimos que el color tenía que ser azul, así que nos pusimos manos a la obra, amasamos el fondant, echamos tinte azul hasta que elegimos el color que veis en la foto.

Y ahora que hacemos?, no puede faltar una frase deseando un feliz cumpleaños, con lo que ese fue el siguiente paso, menos mal que Marta tenía unas plantillas parecidas al scrabbel y quedó perfecto.

El número de los años no puede faltar!!!, pero aquí no había ningún molde que se asemejara a algún número, con lo que esto si que hubo que hacerlo a mano con un cuchillo bien afilado. No quedaron mal, verdad?

Bueno, la tarta está quedando bien pero un poco sosa chicas, imaginación al poder!!!. Y así dimos los últimos retoques con un molde de corazón haciendo formas abstractas y rodeando la tarta.

El último toque lo dió la glasa rellenando las letras y haciendo unas bolitas alrededor.

Y.... voilá.... aquí teneis el resultado de una tarde de trabajo.

Solo queda desearle a Rafa un feliz cumpleaños y que le encante la tarta.


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